La actuación del diestro José Ortega Cano en la mallorquina Plaza de Muro el pasado 24 de junio es un mal ejemplo para la Fiesta. Un torero que no esta en condiciones no puede arrastrar su nombre por las plazas de toros, porque es un fraude para los aficionados y un descrédito para la Fiesta. Allá él si quiere pisotear el recuerdo de buen matador de toros que ha dejado entre los aficionados en algunas fases de su carrera, pero es una pena que se empeñe en emborronarlo.
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Sobre Ortega Cano también reflexionan don Pepe y don José desde su blog.
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